Facultad de arquitectura en Cuenca

La ubicación del proyecto es en el actual jardín del Obispo. Está situado al este del Palacio Episcopal y forma parte de la que sin duda es la fachada más icónica de la ciudad. En este mismo lugar se encuentra, bajo siglos de material de relleno, la muralla de la ciudad, que se recupera e incorpora al proyecto.

La propuesta se articula en torno al estudio de las cualidades del entorno. Es un paisaje caracterizado por fuertes volúmenes calcáreos y dramáticas sombras que los potencian. Nuestra propuesta pretende una mímesis con esas cualidades.

A través de unos contundentes volúmenes de hormigón se da respuesta a la continuidad del paisaje. El entorno más inmeditao se incorpora manteniendo el paso de la calle Canónigos. El pasado más lejano se descubre mediante la recuperación de la muralla. Está en el límite de la ciudad construída, y a la vez en el límite de la hoz. 
 
El conjunto sirve de referencia al visitante, y se convierte en un engranaje fundamental de lo que ha sido una de las entradas históricas a la ciudad.